Los vítores de Salamanca son el símbolo que utilizaban los universitarios para celebrar el título de Doctor. Pero hay otro significado de los vítores menos evidente.
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Los Vítores son uno de los símbolos más populares de Salamanca.
En esta revista de viajes digital hemos preparado el resumen más completo sobre qué significan los vítores de Salamanca y cuál ha sido su evolución a lo largo de la Historia.
El Palacio Anaya es uno de los sitios imprescindibles que visitar en Salamanca para admirar de cerca los famosos vítores.
Qué son los Vítores de Salamanca
Aunque son uno de los símbolos más visibles de Salamanca, no todo el que los ve por sus calles sabe qué son los vítores.
Herederos del crismón cristiano, los vítores de Salamanca fueron adoptados por los centros universitarios para celebrar que sus alumnos obtenían el título de Doctor.
El anagrama de los Vítores de Salamanca incluía, como dice la RAE, las palabras “Víctor” o “Vítor” y el nombre de la persona que había conseguido ese título.
El alumno que alcanzaba el título de Doctor tenía que pagar el coste del Vítor y unas fiestas que solían incluir una comida o una cena para profesores y amigos.
Esos estudiantes también debían abonar un espectáculo taurino, que servía para obtener la pintura con la que luego se dibujaban los Vítores de Salamanca.
Leyendas de Salamanca
Los vítores son sólo una de las muchas curiosidades de Salamanca. La ciudad está llena de leyendas y misterios que merece la pena conocer durante un recorrido nocturno a pie. ¡Una forma muy original de ver y conocer la ciudad!
Pintura de los Vítores de Salamanca
Los vítores de Salamanca se pintaban con un color rojo muy particular, a base de sangre de toro.
De ahí que el alumno que obtenía el título de doctor, tuviera que pagar de su bolsillo una corrida de toros para sus profesores y compañeros.
A la sangre del toro se añadían pigmentos vegetales y minerales hasta obtener el particular tono rojizo de los Vítores de Salamanca.
Vítores de Salamanca hoy
Aunque a día de hoy en Salamanca apenas quedan un centenar de vítores anteriores al siglo XIX, la tradición sigue viva.
Eso sí, con algunos cambios.
Los Doctores que obtienen el título en la Universidad de Salamanca sigue comprometidos a invitar a comer a sus tutores y examinadores.
Esta tradición ayuda a respaldar la economía de la ciudad, que siempre ha encontrado un motor muy importante en la comunidad universitaria.
A día de hoy, la pintura para los Vítores de Salamanca ya no se elabora a partir de sangre de toro.
Otra diferencia con respecto a los vítores antiguos es que ahora también se pueden encargar en honor a los visitantes ilustres de Salamanca.
