El origen de las dunas de Maspalomas está en la acumulación de sedimentos procedentes del interior de Gran Canaria por los vientos.
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El equipo de esta revista de viajes digital está enamorado de las Islas Canarias.
Este archipiélago es un paraíso natural único en el mundo.
Entre sus rincones más antiguos y valiosos destacan las Dunas de Maspalomas.
Este conjunto de dunas tiene miles de años y es fundamental para otros espacios naturales cercanos.
Descubre con nosotros el origen de las Dunas de Maspalomas y qué protección reciben a día de hoy.
Origen de las Dunas de Maspalomas
Las Dunas de Mapalomas tienen miles de años.
La acción combinadas de las olas del mar y de las rachas de viento ha ido acumulando los sedimentos que dan origen a las Dunas de Maspalomas.
Los detritos procedentes del Barranco de Fataga, y de otros aledaños, también han contribuido a la creación de las Dunas de Maspalomas.
Sólo con mirar las Dunas de Maspalomas cuesta imaginar el trabajo que la Naturaleza ha realizado y la cantidad de tiempo que ha sido necesaria para la formación de estas dunas.
Protección de las Dunas de Maspalomas
Las Dunas de Maspalomas son uno de los espacios naturales más delicados de España y de Europa.
El antiquísimo origen de las Dunas de Maspalomas las hace especialmente valiosas, pero también muy sensibles a los efectos de las visitas masivas y la presión urbanística.
Hay que tener en cuenta que junto a los arenales de Maspalomas, se han ido desarrollando otros ecosistemas igualmente importantes.
Un ejemplo de ellos es el oasis de palmeras junto a las Lagunas de Maspalomas.
Allí anidan distintas especies de aves, muchas de ellas migratorias.
En los últimos años se ha conseguido recuperar otra especie endémica de las Dunas de Maspalomas: la siempreviva rosada, que desapareció en 1973.
El valor ecológico de las Dunas de Maspalomas hace que en 1987 fueran declaradas espacio protegido.
En 1994 se catalogaron como Reserva Natural Especial.