El chocolate es uno de los alimentos más extendidos en el mundo (como los mejores chocolates belgas), sobre todo en los supermercados de los países más desarrollados. Pero no todo el chocolate es chocolate, ya que la mayoría de los productos que se comercializan son pastas de cacao mezcladas con leche y azúcar. El chocolate negro 100% es amargo y poco agradable a los paladares educados en el siglo del azúcar.
Se conocen algunas propiedades del chocolate negro gracias a los estudios que se han realizado alrededor de este alimento. Pero es importante señalar que estas propiedades se refieren al cacao puro, sin mezclar con aditivos. La Universitat Oberta de Catalunya (UOC) ha publicado recientemente un artículo en el que varios de sus profesores e investigadores destacan las propiedades estudiadas del chocolate negro.
El alto contenido de polifenoles (flavonoides y procianidinas) que se encuentra en el cacao es un elemento beneficioso para la salud cardiovascular. Es decir, estos compuestos ayudan a proteger el corazón, porque funcionan como antioxidantes, antiplaquetarios y antiinflamatorios, según Alicia Aguilar, profesora de los Estudios de Ciencias de la Salud de la UOC. Por otro lado, investigadores de la Universidad de L’Aquila, en Italia, han descubierto que tomar todos los días una dosis de chocolate sirve para luchar contra el deterioro cognitivo, mejora la memoria de trabajo (la que funciona a corto plazo almacenando y ensamblando la información) e influye en el procesamiento de la información visual.
Aguilar explica que existe una mayor proporción de polifenoles en los chocolates que cuentan con una concentración de cacao elevada, es decir, superior al 75%. Lo que no está tan claro es que el chocolate ayude en los momentos de bajón anímico. Se han realizado pocos estudios en este sentido y aunque parece que el efecto antiinflamatorio que produce y la generación de serotonina (un neurotransmisor que regula muchas funciones vitales) indican que el chocolate puro mejora los estados de ánimo, aún no se puede concluir con toda certeza.
Quedan otras dos cuestiones. Primero, el posible efecto de adicción que puede provocar el consumo de chocolate. Tampoco hay muchos estudios sobre las consecuencias negativas de un elevado consumo de chocolate, por lo que no se puede decir que el chocolate negro sea adictivo. Sin embargo, sí se ha demostrado que los ingredientes que se añaden al chocolate, como los azúcares (sustancia que ha viajado mucho en la historia), pueden generar este efecto. Pero, en todo caso, se daría en chocolates que no son puros.
La segunda preocupación que falta por abordar es si el chocolate engorda. La realidad es que el chocolate tiene un contenido energético elevado: por cada 100 gramos, entre 400 y 500 kcal, de media. Depende del tipo de chocolate y siempre chocolate negro, sin aditivos como la leche, azúcares o grasas. Así que el consejo es consumir el chocolate negro puro en pequeñas cantidades.
